Con esta cierro las entradas dedicadas a mis impresiones iniciales sobre el Tamron SP 150-600 VC con el que, tras la breve experiencia de usarlo, me siento muy, muy contento.
Cuando me decidí a probar este objetivo estaba buscando un zoom flexible, ligero en comparación con el 500 f4, robusto, con una buena respuesta de AF y que me permitiera usarlo a pulso. Básicamente quería un objetivo todoterreno para llevar en las caminatas por el campo sin que tuviera un precio desorbitado. El nuevo AFS Nikkor 80-400 era muy tentador pero, sinceramente, me parece que su precio es excesivo. El Sigma 120-300 2,8 me resultaba demasiado pesado y demasiado corto en lo que a distancia focal se refiere y las alternativas de Sigma 150-500 y 50-500 ni siquiera me las planteé.
Así que cuando salió el Tamron y comencé a ver buenos indicios de su calidad en internet me decidí a probarlo. Francamente, por unos 1000 euros no esperaba nada del otro mundo pero, sorpresa, ha superado con creces mis expectativas. Probablemente si ahora tuviera que volver a decidirme me sentiría sumamente tentado por el nuevo Sigma 150-600 de la serie Sport que apunta muy buenas maneras. Mejor construcción, mejores características ópticas, un limitador de enfoque mejor pensado y ese bloqueo de distancias focales que supera al Tamron. Un poco más caro pero muy lejos del estratosférico precio del Nikkor. Aunque, tengo que decir que si bien los datos técnicos de calidad de imagen superan al Tamron, todavía no he visto ninguna imagen del Sigma que sea notablemente mejor que lo que estoy viendo con el Tamron.
Esta serie de cabra montés es la primera prueba del uso real que quiero darle al objetivo y las realicé durante una mañana de caminata por la sierra, subiendo y bajando por las rocas tras las cabras y acompañado de un monopié.
Si bien el objetivo se portó muy bien aún tengo que adaptarme a su uso aunque todo se andará. Noto que la exposición en manual con este objetivo tiende a dar resultados sobreexpuestos respecto a lo que obtengo con el 500 pero ese es un detalle sin importancia al que me adaptaré rápido ya que es muy fácil de corregir y no es un problema en si del objetivo sino del usuario. Otro "problemilla" de uso que he encontrado es que inevitablemente tiendo a ponerlo a 600 mm lo que significa que lo estoy usando más allá de los 400 mm que le daba de confianza o, lo que es lo mismo, que estoy usándolo en la distancia focal que probablemente más flaquezas tenga este objetivo. También se podía decir que el hecho de usarlo a 600 mm significa que es bastante mejor de lo que me esperaba pero, bueno, sea como sea mi intención es usarlo como máximo hasta 450-500 mm para aprovechar el rango focal en el que el rendimiento parece mejor.
Por último, hay que señalar que solo he podido probarlo con mi D300 y este objetivo debe dar mejor rendimiento con cámaras que permitan tirar de un ISO más alto para así poder compensar su reducida luminosidad. Con mi D300 prácticamente estoy al límite si intento usarlo con poco luz.
Por resumir de algún modo mis sensaciones con este objetivo señalaré las cosas que más me han gustado las que menos me han gustado. Por ahora, ya que a medida que lo vaya usando mis impresiones sobre algunos aspectos se irán aclarando así que iré modificando estos listados ;-)
Entre las cosas que menos me gustan de este objetivo están:
- Limitador de distancia focal: el rango que le han puesto lo hace, al menos para mí, absolutamente inútil.
- Equilibrio: al extender el zoom al máximo se produce una descompensación importante del peso hacia la parte frontal que complica su manejo a pulso aunque, siendo justos, es algo que se puede esperar de un zoom de este tipo.
- La base del collar para trípode: me resulta muy corta para usar a pulso, especialmente considerando el desequilibrio de masas que se produce al extenderlo. Ya estoy buscando una pletina más larga que además me permita usarlo con la Wimberly head.
- Que no tenga sujeciones para la correa en el collar de trípode.
- Aunque no es definitivo porque no lo he probado lo suficiente, los resultados que he obtenido en situaciones de acción no tienen el mismo nivel de definición que las imágenes de sujetos estáticos con independencia de la velocidad de obturación que se use.
- Que no tenga algún tipo de bloqueo físico que me impida ponerlo a más de 500 mm de distancia focal... tendré que inventar algún sistema alternativo para lograrlo je, je.
Y las cosas que más me han gustado por ahora:
- Su excelente relación calidad precio.
- La flexibilidad de su rango focal.
- Su velocidad de AF hasta 450-500 mm, me ha parecido bastante aceptable. Infinitamente mejor que la de mi viejo AF Nikkor 80-400...
- La fiabilidad del AF. Entre 150 y 450-500 mm la respuesta del AF a la hora de adquirir el enfoque me parece bastante buena en condiciones de luz adecuada. Por encima de 450-500 mm ya no es tan fiable aunque eso también era de esperar.
- Una calidad óptica mucho mejor de lo que esperaba.
- Un bokeh bastante decente.
- Que no se pueda usar con la Nikon V1... sí, así es, casi que me alegro de que sea así porque de lo contrario me vería haciendo filigranas con este objetivo y la V1, lo cual le restaría ese punto de flexibilidad para patear el campo que buscaba.
- Su usabilidad a pulso. Me gusta bastante el comportamiento del objetivo a pulso ya que su estabilizador responde bastante bien a la regla de "1/distancia focal = velocidad de obturación mínima" especialmente ente 150 y 500 mm.