Nikon D7200, Tokina 14-24 f4, a pulso, exposición manual (panorámica a partir de dos fotogramas) |
Este año he elegido para mi felicitación anual una foto en la que, cosa rara en mí, las aves no son protagonistas sino unos animales muy lejanos a los plumíferos seres que tanto me apasionan. Se trata de un grupo de varios Ctenóforos nadando en uno de los acuarios del Oceanographic de Valencia. Me parecieron unas criaturas fascinantes, nadando en la oscuridad de su habitáculo tan solo iluminadas por una tenue luz cenital que arrancaba arcoiris a las largas filas de cilios longitudinales que festonean el cuerpo de estas medusas. Las pequeñas partículas en suspensión que había en el agua, imperceptibles para mí en el momento de realizar las fotos, se convirtieron en una miriada de estrellas al ajustar los niveles de luminosidad con el Camera RAW. El paralelismo con un paisaje galáctico se hizo evidente para mí como por arte de magia... :-)
Deseo a todas las personas que visitan mi modesta bitácora fotográfica que el 2016 os traiga mucha luz, para los objetivos de la cámara y para todos los aspectos de vuestra vida :-)
Por cierto, las mágicas criaturas que protagonizan esta foto son Ctenóforos de la especie Mnemiopis leidiyi, una medusa invasora procedente de las costas atlánticas americanas y que desde los años 90 se está expandiendo por todos los mares europeos a causa del agua de lastre que trasportan los barcos.