Nikon D300, AFS Nikkor 500VR+1,4X-TC, trípode y Wimberly II, exposición manual
El otro día estuve alucinando con una foto Óscar Domínguez en la que el protagonista, un alcaraván acicalándose el plumaje, está rodeado de desenfoques dorados y casi en una de las esquinas, vamos que casi hay que descubrilo por casualidad. Color por un tubo, composición y creatividad.
La foto de Óscar me recordó, salvando las distancias, unas que estuve haciendo el domingo pasado con los flamencos.
En fin, que de vez en cuando uno encuentra imagenes refrescantes que inspiran mucho y que animan a continuar intentando hacer cosas diferentes. Por cierto, la foto del alcaraván no es de casualidad sino una más en un excelente portfolio así que recomiendo una visita a la web de Óscar Merece la pena.
PD. La foto del alcaraván se puede ver aquí
4 comentarios:
Poco a añadadir a tu reflexión que no comparta. Óscar tiene un fuerte estilo personal diferenciado, fresco, que engancha. La primera de las propuestas fotográficas que presentas de las dos es la que más me gusta. Buen trabajo.
Hola Juan. Muchas gracias por tus palabras. Para mi la mayor motivación es intentar exprimir las posibilidades. Me interesan las imágenes que muestran más que al sujeto protagonista bien grande, su relación con el entorno y cuando miro por el visor intento ver un conjunto de formas, colores, espacios... más que a un motivo concreto.
Las dos fotos que propones me parecen muy buenas, especialmente el efecto de la vegetación delante los flamencos.
Hola Quim. Muchas gracias.
Un abrazo a los dos.
Muchas gracias por pasar y comentar :-)
Hola Juan, espectaculares tomas, un estupendo trabajo con los Flamencos. Un saludo.
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